UNA MORALEJA MUY IMPORTANTE

MARTES 14/03/06

Ayer tuvimos una clase de prep-parto muy didáctica.
Cada día estoy MAS contenta de haberme apuntado a las clases de la Seguridad Social, porque efectivamente, son tal y como me lo contaron.
Muy amenas, muy didácticas, la matrona , Nuria, es estupenda, y sobre todo, te quedas con una sensación de tranquilidad por todo lo que aprendes y por comprobar que matronas como ella, son las que manejan el cotarro en la SS (aunque siempre hay la matrona salida del infierno… como en todos sitios, verdad?)

Y que aprendimos ayer? Algo muy importante, empezando por la moraleja final:

Ir lo más tarde posible al hospital.

Aunque tu pareja esté deseando, ante el primer dolorcillo, encasquetarte a los de “verde” que son los que saben, porque se piensa que si se espera, vas a soltar al bebé en medio de la cocina….
Aunque tu madre o tu suegra, te esté dando la coña para quedarse tranquila y te ponga el taxi en la puerta de casa (lo mejor es no decir nada a nadie, y menos a los familiares hasta que el momento sea inminente)…
Aunque tú tengas miedo por lo que pueda pasar, por toda la incertidumbre que te rodea

Hay que ir lo más tarde posible al hospital.

Porqué?
Porque mejor se está en casita.
En casa se puede comer (a poquitos, porque tampoco se tendrá hambre), se puede beber (luego en el hospital, por protocolo no te dan nada de agua por posibles problemas si hay anestesia y con el esfuerzo y el calor, se pasa muuuuucha sed), se puede andar (para dilatar mejor), se puede cocinar (para entretenerse y no estar tan pendiente de las contracciones).
En resumen: se puede hacer lo que te de la gana.

Que pasa si vas antes al hospital? Una de dos, o te mandan a casa (en el mejor de los casos, porque te estarán haciendo un tremendo favor) o te enchufan las correas, te abren una vía y te tumban en una camilla. Si esto último ocurre, el parto además de hacerse larguísimo, tiene muchas posibilidades de terminar en inducción (para ahorrarse la cama que estas utilizando) porque si no dilatas rápido te chutan la oxitocina (con los tremendos dolores que ello conlleva), pedirás la epidural a gritos desde el primer momento del goteo, y además, no podrás moverte a tus anchas, ni comer, ni beber, ni nada de nada.

Así que la clase de ayer, se resumió en esta moraleja tan importante: Aguanta en casa cuanto puedas!

Que te empiezan las contracciones? Pues espera a que estas sean cada 5 minutos en una hora o más, porque la dilatación en casa es mejor llevada.
Que rompes la bolsa de líquido amniótico? Siempre que el liquido no sea oscuro (tirando a verde, lo que significa que hay “sufrimiento fetal”) no hay problema. Que rompes la bolsa a la mañana, pues vete al mediodía, que la rompes al mediodía, pues vete a la tarde-noche… No hay problema, porque aún hay mucho líquido dentro.
Que expulsas el tapón mucoso? Tranquila, habrá algo de sangre, por la venitas que tiene, pero esto no significa que ya estés de parto. Aún hay que esperar, porque las contracciones tendrán que llegar.

Cuando ir “corriendo” al hospital?
- Si hay mucha pérdida de sangre (significa que la placenta se ha desprendido. Esto no suele ser normal, porque no es algo que ocurra automáticamente. Si la futura mamá tiene lo que se denomina “placenta previa” se lo habrán diagnosticado con antelación en alguna de sus muchas ecografías). Algunas veces, esto se confunde con la pérdida del tapón mucoso.

- Si el liquido amniótico es oscuro

- Si no hay movimiento fetal (en el último mes, desde hace bien poco, se centran mucho las matronas en este último dato. Mediante unos gráficos que dan a la madre, hacen rellenar datos para comprobar que le movimiento fetal es normal.

- Si lo ha recomendado el ginecólogo o la matrona, porque el bebé viene de nalgas o por otras patologías.

Por cierto, una razón más para no ir pronto al hospital, es que el 60% de los partos inducidos terminan en cesárea. Curioso no??